Mujeres coleccionistas de vino rompen paradigmas
Por Amanda Díaz de Hoyo
Especial para Vibeer
San Juan, Puerto Rico (5 de abril de 2022) – Cuestionar por qué en pleno siglo XXI no hay una cantidad significativa de mujeres coleccionistas de vinos es materia de reflexión antes de emitir una respuesta concienzuda.
La inquietud la comenté a Margaret Hénriquez, quien en las postrimerías de su labor como CEO de la casa champánera Krug, visitó Puerto Rico. “Solo conozco una, radicada en Londres” comentó para mi sorpresa, pues pensé que había muchísimas.
No sólo la representación femenina como coleccionista es muy baja, sino que en otras ramas de la industria existe una marcada desproporción . Para poder analizar cuán complejo ha sido el panorama de la mujer dentro del vino, of course, me puse a investigar para ver por qué ha ha calado la inequidad sistemática en el mundo del vino.
Un leve repaso histórico
Los hallazgos arqueológicos en Armenia indican que 6 mil años e.c. ya se producía vino. Su consumo era bien generalizado en el mundo de esa época por lo que los oficios relacionados con la vitivinicultura ya existían. La primera gobernante reconocida en la historia de nuestra humanidad antes de regir a su pueblo era tabernera o bartender, oficio muy apreciado desde ese entonces. La reina Kubaba, de la 3ra dinastía Kish de los sumerios, se ganó el aprecio de sus súbditos por su trato y dedicación. Y sí, dignamente atendía una taberna, como otras mujeres de su época. Eso quiere decir que la labor fuera del hogar ya se practicaba. Así como Kubaba, otra reina poderosa fue la de Saba, que gobernó a los sabeos, que entonces se ubicaba entre Etiopía y el actual Yemén. Esta última se menciona tanto en el Corán como en la Biblia. A la de asaba la traigo a colación porque la mayor carga de inequidad radica en las religiones abrahámicas: judaísmo, cristianismo e islamismo. De ahí pasa a la política y a la sociedad. Ahí está la raíz de tantos años de lucha por los derechos de la mujer.
La sociedad patriarcal,ha hecho creer al hombre que este controla el linaje,la herencia y la propiedad. Esto viene desde hace 12 mil años. Cambiar los paradigmas toma tiempo pero no es imposible.
De vuelta al presente
En pleno siglo XXI, aún con leyes que aparentan equilibrar la balanza entre hombres y mujeres, la disparidad es asombrosa.
En un artículo de guildsomm.com, titulado Women in Wine: Systematic Exclusion & the Success of Tenacious Women, más bien dirigido a la parte enológica y de negocios se señala que a pesar de que existen leyes para proveer trato igual entre hombres y mujeres, “la jerarquía de género está profundamente arraigada”. Existe una marcada desproporción por las escasas mujeres que ocupan puestos de alta gerencia en el negocio de los vinos y licores.
Esto se aprecia también en la desproporción entre propietarios de viñedos. Según la Asociación Americana de Economistas de Vino, en California sólo un 5% de los viñedos es propiedad de mujeres, en el estado de Washington es solo un 3%. Para colmo, detrás del sexismo también está el racismo.
El artículo de Tanya Morningstar es solo uno de los que exponen la inequidad. Para ver cómo se posiciona la mujer compradora de vinos, un análisis de mercado de ARENI-Global, instituto de investigación y acción con base en Londres, que realizó una encuesta cuantitativa de consumidores de vinos finos usando muestras de EE.UU., Reino Unido, China y Hong Kong, encontró que ha aumentado la compra de vinos finos por parte de mujeres. Sin embargo, la desproporción mayor entre compradores masculinos y femeninos está en los EE.UU. Y Reino Unido donde los hombres representan el 70% de los compradores, mientras en China y Hong Kong, se balancea en un 50%. Esto dice mucho de la inequidad que permea en la sociedad patriarcal de estas dos naciones.
La inequidad en sueldo y la falta de confianza en sí mismas de muchas mujeres es parte del rezago en el campo de la colección de vinos. Pero hay noticias alentadoras, como el aumento en compra de vinos por parte de mujeres en subastas mientras los consumidores jóvenes compran online y mediante apps.
Sí hay coleccionistas mujeres. Una de las coleccionistas más reconocidas es Martha Welch, quien ha seguido los pasos de su padre y se ha convertido en un referente para otras coleccionistas. La puerta está abierta, ahora el éxito va de la mano con la tenacidad, la confianza y el aplomo.